"La rebelión es mirar una rosa hasta pulverizarse los ojos" Alejandra Pizarnik-en esta vida

"Solo veo rosas" Alejandra Pizarnik-más allá de esta vida-

Solo soy pura rebelión, vino a decir... aunque no sola estás

Vos no está sola. Y esta rebelión se hará. Y no desde la soledad. No desde cuatro gatos somos y por eso nos pisotean. ¡Una ola de Rebelión vendrá que tambaleará los cimientos podridos de estas sociedades!






sábado, 28 de junio de 2008

era como hacer una leve presión que indica entrega

Amorcito, ejercer una leve presión en el exacto lugar de Dios que tú eres, en tu Seer –-con dos ee, la de mi ser donada la tienes por anticipado, la de tu ser que quieres entregarme "donante fabulosa" y alguien algo lo impide, sea mi falta de Atención, sean mis muchas faltas en tantas prácticas sobre todo Alquimias, Amor sobre todo-- presionar sólo en ti cariñito: Carmen se entrega a esa parte de Dios en exclusiva, no quiere saber del resto más que por oídas de tu hermosa voz eternamente en mi oído, envainada, también, en su exacto sitio, el mullido lugar de Dios de todo mi yo siempre sediento de la entrega que significa esa leve presión.

Estas son las pequeñas cosas sr. Gala que son el Paraíso, Pizarnik sí supo verlas, y no los mocos del hijo, enseñarle a sonárselos del padre (Esa desafortunada idiotez dijo Antonio Gala dramaturgo, poeta, novelista, etc, español)

Es suficiente darse algo más, muy poco más, y entonces aparecen cosas donde siempre se creyó que no las había.

Y hasta ahí otra pequeña joyita que extraigo, pero no borro allí, en mi "Solo veo rosas" en ya.com del cual, y su mes de mayo de 2006, ya van extraídas otras dos, una para "Sexo del alma" y otra en "Solo veo rosas 2"

Pero hago una reflexión aquí de lo en 2006 dicho:
Mi leve presión sobre la parte de Dios que eres tú Alejandra, esa entrega fabulosa, tu Voz de Otro Mundo venida pero tan como cuando estuviste aquí, en mi oído, envainada en mi oído como la más fantástica penetración; pero desde luego... mis muchas faltas en tantas prácticas sobre todo Alquimias, Amor sobre todo. Bastaría que me olvidase un poco más del rencor, poner un poco más de mí en ese, si imposible perdón para los que no olvidamos las ofensas tan fácilmente, al menos fantástica desmemoria que quede de plano ocupada por esta vena de Amor por ti, este fantástico Hilo de tu lila color, Sutrattman, por la respiración.... Aunque tampoco creo que ese esfuerzo de Amor a la vida esta de aquí te devolviese, primera de todas las demás resurrecciones. Mas así vamos a traspasar esa puerta de luz, ayudados por la muerte o no: Y era como entrar de tu mano en una casa de Rosas
En esa preciosa casa estás tú y me esperas
por ello lo confiesas Solo ver rosas

viernes, 27 de junio de 2008

De mis innúmeras colecciones de "Cantar de los Cantares". "Cantar de los Cantares tuyos, no", dijo Alejandra, ella la enamorada de todas las Carolines



Alcoforados, o Marianas, y las Gunderode (von Gunderrode)

"Nuestra hermana pequeña no tiene tetas"
(Los machistas de la Biblia, por supuesto)

Y no era eso.
Mis hermanitos,
pasión de hermanos, tontos del culo,
se estaban perdiendo lo mejor.
No sabían que no eran mis no-senos,
vaya que sí senos,
otro podría atestiguarlo,
pues no,
(No sé de dónde tomé prestada esta "muchas manos para tan pocas tetas")

no eran mis senos o mis no-senos:
¡eran sus manos!
Cómo verían, ellos, los ciegos, mis dos tetitas.
¡Eran sus manos
tan firmemente los enfundaban!
Tenga usté hermanos que te vigilen
....y se pierden lo mejor.

¡¿Y si hubiesen escuchado lo que me dijo?!:
-Que no es mi pene que es tu vagina.
(Oigan, allá en lo antiguo
también conocíamos de esta terminología
aunque nos la guardásemos en nuestro almario)
-Que no es mi pene que es tu vagina,
tanto lo aprietas
que ni lo siento.
¡Que me siento, que me siento
....TTTTúúúúú!

Esto pasa por irse tan a destiempo
con esto de la premura de los hermanos.
¡Se olvidó hasta del pene!
¿Y ahora qué hago yo?
¡Qué compromiso!

Bien, dado que no tengo tetas para estos gansos,
quizá me admitan que tenga pene.

jueves, 26 de junio de 2008

Ana como palabra maestra para abrir el libro (Estamos en "Dios pone el nombre", que no sé porqué cojones titulé así, cuando más propio por lo que leo,

es el subtítulo "El Libro de la Vida"

Ana como palabra maestra para abrir el libro

(Y el "Ana" además de hacer referencia a la "anafase" mitótica, era también el nombre de mujer que me revolvió de pica la entraña por esos días.
Empezaba el pequeño poema con una cita de mí misma, cita de palabras que se encuentran en el
"Diez de rosas rubíes corazones" capítulo perteneciente a mi "Nunca muerta") :

Me siento lanzada a las estrellas rocas
por una mano violenta ira
que quiere destruirme
Anabolé: Lanzamiento
Lanzar a esta raza a las estrellas rocas de su destino.
Ana: Arriba; Phasis: Apariencia
Ana-fase: La más hermosa fase de una luna
núcleo en el reposo de la perfección hallada
cromosomas ascendiendo,
¡la materia haciéndolo!
como el Cristo, cuerpo de Cristo,
a su Gloria llamado.
Ana: contra todo
de nuevo: Ana
Ana: sobre todo.
¡Arriba!
Arriba, o ¡Abajo!, apariencias,
fases de la luna
¡Fuer-a-pariencias!
Veamos la cara a la Naturaleza
Ana o el fruto de la ciencia
el arte
Ana o el equilibrio de las sustancias
que dan lugar a la Panacea
Obra Inmortal
Ser así.
(Anita, de que me deslumbraste, prueba esta obra inmortal)
*********************************************
Mis muertos celulares

Si nuestras células somáticas no muriesen
pero continuasen por su vía reproductiva,
es de suponer que en poco tiempo
alcanzaríamos en tamaño ¡¿y forma?!
al Universo mismo.

Yo creciendo sin orden disciplina alguna cual un cáncer
(cuánto ha sido así mi vida, pero en medio de las peores represiones) :
Dios: He ahí mi imagen.

Con todas las células que han muerto en mí
sacrificadas en este espacio-templo que me forma
tiendo la mano hacia el futuro
y del pasado tomo el fruto.
Un puente de iones son mis muertos celulares
---células muertas, poetas, pero en la luz con vida---
para llegar a la Ciudad Perdida,
esa Que-fue la Todavía-no-sida.
Un puente de partículas imposibles:
no pueden existir, pero existen.

miércoles, 25 de junio de 2008

Del libro con el que esta mañana amanecí "Dios pone el nombre"

"Camino de espadas"
por el camino de esfuerzo sin descanso
destino único que me dejó en herencia:
El rayo pone una escalera de ira
entre el cielo y la tierra
Así te morías en medio de esa tormenta de rayos


Perder mi padre será como perderme
en la fosa sin nombre del vacío
o en el navío errante
de ese gran navegante
holandés maldito.

Perder mi padre.
Perderle o abolirme.
Quedarme para siempre sin mi nombre,
huérfana, en esa soledad que es hombre,
de la mitad del mundo.

A las miríadas de seres que con su desaparición me disminuyen, nos disminuyen.
¿Es por eso el hombre tan pequeño?
¿De tantas desapariciones?
El hombre que habita este lugar incómodo al que llamamos vida.

Quedarme para siempre sin mi nombre,
pues me quedé sin padre....
Pero también sin mis palabras,
mundo de la cultura
académica palanca para desnucar.
¡Quedaros vosotros sin mi nombre!
Eso es más cierto,

en vosotros la falta.

Me conformo con ser tu Verboto
Palabo Pizarnik.
Así como tú Lautréamont escribiste tu Maldoror
¿Y qué que te desaparecieran?
Así descansaste.
Aunque te hubiese cambiado todos los años de mi vida
por los pocos que te dejaron a ti vivir.

martes, 24 de junio de 2008

“maldigo el vocablo amor con toda su porquería cómo será mi dolor”.



El silencio fantasma de las palabras
Quién me perdió
en el silencio fantasma de las palabras

Tal vez tú pensabas en OO SO MS MM ML G
y todo el alfabeto en iniciales;
pero la que te perdí fui yo,
de eso estoy segura.
Me estafaron tu persona ya empezando mi vida
y durante todo el resto,
vida que no ha valido nada puedo asegurar,
me cago en lo escrito si me sirvió para esto.
Nos cagamos en el Verbo en todas sus acepciones
una que es Verboto,
así me han llamado desde el Más Allá,
y estoy en mi perfecto derecho de evaluar los nombres,
todos los nombres.
Vuelvo a recordarme de Violeta Parra
“maldigo el vocablo amor con toda su porquería
cómo será mi dolor”.
Violeta del Carmen Parra


EL SILENCIO FANTASMA DE LAS PALABRAS
Cuán exacta definición

Etiquetas: silencio palabras fantasma Athánatos Domingo, 23 Abril 2006 10:24
Enlace Permanente
Y este nudo en el corazón en la respiración, ¿qué es?
La impotencia, nuestra compañera inseparable desde que tenemos uso de razón, compañera por la cual he sufrido todo tipo de atropellos, vitales psicológicos laborales, a mi inteligencia, en el país mundo que habito. Impotencia de la cual lo único que me queda por aceptar es el "fin" que llevo eludiendo tantos años que para mí es como si hubiesen sido largos siglos, siglos largos de desesperación dolor; y lo llevo eludiendo para nada. Esto será mi memoria, esté o no a tu lado como me dijiste en el sueño: Este monumental atropello que me atenaza la respiración.

Y borrando tanto de aquí, o sacudiéndose el polvo de los pésimos contactos en todo lo posible, he borrado lo que no debí. No sólo la mediocridá alacránica cultural te asesinó y me asesina Pizarnik, sino que esa mediocridá tiene un gº en primer lugar: el vicio y la indecencia llamada macho, y una condición de gº en particular: la heterosexualidad. El mundo vicioso degenerado analfabeto total a más cultura pringosa de la que se pretendan revestidos, mundo macho heterosexual... la hembra simplemente un tarado adminículo en ese gran escaparate de la polla con pretensiones de sentimientos y cerebro.

Subsanado el olvido: a otra cosa, otro artículo. Por fin poder escribir lo que me pida o exija mi propio coño aquí, como en mis otros blogs, pues lo que mi coño me pedirá y proclamará siempre será la JUSTICIA la VERDAD, así con mayúsculas ambas, al contrario de lo que a la polla, o los chochos tarados del mundo mundial de la expresión les piden las dos únicas neuronas que tengan... y qué buen resultado les dieron las pobres, más que mi cerebro entero; pero claro, ellos son cerebro colectivo, de dos en dos células un mundo mundial de miles de millones de habitantes.... Nos mandan a la fosa mi querida muerta, de infarto, de 50 seconales, de la hoguera de Juana de Arco, o del silencio fantasma, el aislamiento y la separación de su amor como matasen a Juana Inés de la Cruz los putos curas en el México Virreinato español de aquel entonces.
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